Con el objetivo de garantizar una tauromaquia de alto nivel como se ha caracterizado durante años en el municipio el alcalde, Roger Aguilar Arroyo rectificó el respaldó a la decisión del Juez de Plaza Ariel Avilés, de suspender la corrida de toros.
El alcalde señaló que “El juez de plaza es el represente de la autoridad en el coso taurino y respaldo la decisión que haya tomado como fue la suspensión del evento por no existir las garantías para la lidia”.
Se dijo que habrá una multa y de no acatar la sanción del Juez de Plaza se vetara a la empresa, a los toreros y rejoneadores.
Se habló de un acercamiento con el Empresario quien abogó por las dos personas que fueron detenidas por usurpar al Juez de Plaza y fueron liberadas a las 4 de la mañana.
la cantidad de la multa se va a determinar con el jurídico.
Con esto se busca que existan garantías de calidad para el municipio.
Aguilar Arroyo finalizó diciendo que continuará el Juez de Plaza en su puesto, respaldado por el cabildo pues es muestra que se garantiza una tauromaquia de calidad.
Al respecto el Juez de Plaza, Ariel Avilés Marín con una trayectoria de 67 años en el mundo taurino señaló que no se cumplió con ciertas normas, pero sobre todo no se acato la orden de dar agua con sal y azúcar a los toros lo cual hubiera servido para evitar este penoso evento.
“Los toros no se recuperaron por la premura y la empresa no acató una orden, pues tras 40 horas de viaje no fueron capaces de dar un espectáculo”. Señaló Avilés Marín.
“Nuevamente considero que era una falta de respeto para el público y la comunidad motuleña y pido a los que asistir que conserven sus boletos ya que serán válidos para la siguiente corrida.
Cabe señalar que el municipio ha realizado tauromaquia desde hace más de 100 años pues fue en 1901 cuando en lo que hoy es la Plaza Oasis se realizó la primera plaza de toros por Bernardino Avilés.
Tenemos que ser muy respetuosos de la tradición taurina de Motul.
Y para que esto no vuelva suceder se aplicará toda la fuerza de la autoridad a los empresarios.
se agregó que el día de la corrida había más de media plaza llena debido a un buen cartel pues tenía buenos toros y el evento era excelente.
Finalmente mencionó que si bien los empresarios violaron un reglamento fue con la buena voluntad de no defraudar a la afición pero se dió una indicación previamente de hidratar a los animales y no se acató.
