Esta es la historia de un hombre de cuna humilde que supo reinventarse a si mismo, hasta llegar a ser un gran pilar en la economía empresarial turística del estado de Yucatán. La realidad superó a la ficción, una vida de superación que nos enseña que el destino lo haces tú.

El 12 de septiembre de 1937 nace en la ciudad de Merida Miguel Angel Carrillo Espinoza, por el rumbo de San José de la Montaña fue el menor de 3 hijos.

Desde muy pequeño conoció la pobreza y escasez de suministros a causa de la segunda guerra mundial; En su condición una que otra vez le falto alimentos, razón por la

cual desde pequeño comenzó a apoyar a la economía familiar como todos los demás. Al principio ayudaba a su papa a cuidar los animales, le dan un pequeño incentivo que iba guardando en una pequeña lata de conservas, de esta manera juntaba para comprar pepitas que aprendió a tostarlas y las salia a vender.

A los 12 años en su recorrido vendiendo pepitas pasaba por casa de una vecina y vio una hermosa y mediana planta de naranjas, se presentó con la dueña y se dijo muy seguro de sí mismo; señora le compro su mata de naranjas.

Esta se sorprendió al principio y luego empezó a carcajear por la ocurrencia del menor.

Como lo vio tan serio e insistía le dijo que si, Miguel Angel fue a su casa y de sus ahorros

reunidos le pago $3 pesos en moneda de plata de aquellos tiempos por su mata.

Diario se presentaba a regarla cuando comenzó a dar frutos, él vendía los saquillos y de esta

manera reunió más dinero para comprarse un triciclo y hacer otros trabajos entre ellos los traslados de personas.

A los 15 años su vecino Feliciano Palma de oficio orfebre del mercado Lucas de Gálvez, vio el potencial del joven emprendedor y ofreció enseñarle este noble oficio, él acepto ser su aprendiz.

A la edad de 20 años ya hacia sus piezas y las salia a vender, su habilidad con el comercio de prendas de oro y plata le fueron abriendo camino.

Con el tiempo, al retirarse su mentor del negocio, le compra su joyería, llego a tener hasta 20 colaboradores orfebres trabajando para él.

Se hizo de un nombre y fue muy respetado por sus valores agregando que nunca se olvidó de sus raíces.

En 1970 le da otro giro a su vida, ya casado con 7 hijos y un patrimonio respetable, le ofrecen en venta un predio en el Paseo de Montejo, otro en su lugar hubiese elegido vivir en esa hermosa avenida.

Pero siguiendo sus instintos y olfato para los negocios, cabe destacar que él solo contaba con estudios de primaria.

Compra el predio la razon fue que vio en el sector turismo un motor de desarrollo económico y visualizó un hotel innovador para su época.

¡Sus conocidos le decian cuidado eres un joyero no es tu negocio el turismo!,

él persiste en su sueño, contra viento y marea enfrentó muchos retos y desafíos en el

proceso incluyendo no ser sujeto a crédito al considerarlo una inversión riesgosa.

Su inquebrantable voluntad rinde frutos, obtiene un apoyo de FONATUR, el 12 de diciembre de

1984, catorce 14 años después inaugura su primera torre de su hotel, tuvieron que pasar

otros 7 años más para concluir con su segunda torre.

 

Un hotel familiar que lo llamó “El Conquistador”, ya se imaginarán porque la elección del

nombre, con 157 habitaciones es el edificio más alto del Paseo de Montejo y por decreto

del INAH, no puede haber otro edificio más alto que esté en la emblemática avenida.

Don Miguel Angel fallecio el 22 de diciembre del 2017, fue un hombre visionario,

adelantado a su época que practico el turismo responsable (Buenas prácticas empresarial

que estimula el desarrollo y apego al derecho laboral).

Solidario con causas sociales, el mejor legado que le dejo a su familia fue:

Fomentar la identidad propia, rescatar, salvaguardar la cultura y el arte culinario apoyando

siempre a la cadena de valor local.

Con bases sólidas e identidad propia, que aporta una nueva generación, hoy su legado

empresarial turistico perdura a cargo de su hijo el Lic. Jorge Carrillo Sáenz, actual director

general del hotel el Conquistador, que trabaja en la transición para llevarlo a otro nivel en

materia de hospitalidad, más inclusiva y sostenible.

Biografía:

Consejo Valuador del Jaguar del Turismo.