Patrones de espera

Estás a punto de llegar a tu destino y de repente el capitán dice que tienen que esperar un poco antes de aterrizar. ¿Cómo sabe la tripulación por dónde es seguro sobrevolar?

Cada día la población crece, los viajeros recorren el mundo, los negocios se concretan en todos los rincones del planeta y esto incrementa la demanda de vuelos. Como consecuencia se puede generar tráfico aéreo que, en conjunto con incidentes o mal tiempo en el área de aproximación (niebla densa, tormentas eléctricas o vientos fuertes), pueden causar que se solicite esperar antes de aterrizar.

Para este tipo de situaciones, existen procedimientos llamados Patrones o Circuitos de espera, indicados por los controladores de tránsito aéreo, que se realizan cuando el avión no puede hacer su aproximación final. Son rutas predeterminadas en el espacio aéreo cercano a un aeropuerto en donde se pide a los pilotos volar de manera circular hasta que se les autorice continuar con su aterrizaje.

El controlador de tránsito aéreo es quien da las instrucciones y asigna a cada avión un nivel de vuelo y velocidad específicos para mantener una separación segura entre las aeronaves que estén en espera. A menudo, se utilizan puntos de referencia fijos en el espacio aéreo para que los aviones se mantengan en su posición y tengan una secuencia ordenada para el aterrizaje.

Un patrón de espera forma un óvalo sujeto por una intersección (punto):

 

Los tramos largos son de entrada y salida. En los patrones de espera estándar todos los virajes se realizan a la derecha y su velocidad debe ser suficiente como para tardar un minuto en recorrer cada tramo (cuatro en total). La velocidad y rumbo se van ajustando dependiendo del viento.

Para comenzar un circuito de espera, la Administración Federal de Aviación de Estados Unidos (FAA por sus siglas en inglés) recomienda seguir algunos métodos, mismos que dependen de la dirección (rumbo) que tenga la aeronave en el momento de la instrucción al patrón. Por ejemplo:

 

 

Estos circuitos se planifican y organizan de manera eficiente para minimizar las demoras y garantizar la seguridad de los vuelos. Los controladores de tráfico aéreo trabajan en estrecha colaboración con las aerolíneas, pilotos y autoridades para asegurarse de que las aeronaves se mantengan en espera el tiempo necesario y sean autorizadas para continuar su aproximación o aterrizaje de manera segura.