• México aún no logra recuperar los niveles de actividad económica 

Mérida, Yucatán, a 6 de diciembre de 2022.- El aumento al salario del 20 por ciento podría parecer elevado, pero la alta inflación que se ha vivido en México durante el 2022 ha elevado los precios de los bienes y servicios consumidos, por lo que realmente esta propuesta representaría apenas un aumento considerable y útil, destacaron expertos durante el Seminario de Actualización 2022 de la Facultad de Contaduría y Administración de la Universidad Autónoma de Yucatán (UADY).

Durante la segunda sesión de este seminario, en donde se trató el tema “Efectos del ajuste a los salarios mínimos”, la profesora de la Universidad Autónoma de Aguascalientes (UAA), María del Carmen Bautista Sánchez detalló que la inflación ha llevado a que los precios de los bienes, consumidos por la población de menores recursos, aumente en más del 14 por ciento, por lo que el aumento propuesto del 20 por ciento al salario mínimo representa apenas un aumento real de poco más del 5 por ciento.

“A este ritmo se requeriría otro sexenio con aumentos reales de la misma magnitud para que el salario mínimo proveyera al menos los ingresos que requiere una familia para no ser considerada pobre”, apuntó.

Destacó que cuando el actual gobierno renunció a realizar una reforma fiscal profunda, el abanico de instrumentos a su disposición para impulsar una agenda realmente redistributiva se redujo considerablemente.

Además, dijo, México es una de las pocas naciones que aún no logra recuperar los niveles de actividad económica previos a la pandemia de Covid-19, por lo que el espacio fiscal para implementar otras medidas es muy limitado.

En cuanto a los efectos del ajuste a los salarios mínimos, agregó que el sueldo básico pasará de $260 pesos diarios a $312 pesos en la frontera norte, mientras que en el resto del país el pago subirá de $172 a $207.

“Sin embargo, analistas advierten que, aunque este incremento es favorable para los trabajadores formales con menos ingresos, la medida tendrá un efecto marginal debido a una escalada de precios a niveles del 8.14 por ciento, la inflación más elevada que se ha registrado en los últimos 20 años, lo que supone en términos reales que el aumento salarial será del 11.8 por ciento”, afirmó.

Por último, comentó que, de acuerdo con las cifras del Gobierno, el aumento beneficiará de manera directa a 6.4 millones de trabajadores formales.

Recordó que los trabajadores presionaron por un aumento del 25 por ciento, mientras que la iniciativa privada buscaba un alza de solo el 15 por ciento. Al final, se consiguió como un punto medio el consenso del 20 por ciento de alza, porque un alza demasiado agresiva podría provocar un efecto sobre las expectativas de inflación en los inversionistas, mientras que un incremento mínimo no alcanzaría a cubrir el aumento de precios en los alimentos.