Mérida, Yucatán, a 18 de noviembre de 2022.- En México, cinco millones de personas de 15 años y más se autoidentifican como LGBTI+, debido a su orientación sexual, identidad de género o ambas, declaró la Dra. Marcela Durán Rosado durante la conferencia “Homo/transfobia: la discriminación socialmente aceptada”.

Como parte de la inauguración de la XVI Feria de la Salud de la Universidad Autónoma de Yucatán (UADY), la experta en el tema ofreció la primera conferencia de esta jornada, en donde platicó con alumnos de nivel bachillerato sobre la homofobia y transfobia, así como la identidad de género y orientación sexual.

Apuntó que la sexualidad se descubre, no se elige, contrario a los estereotipos que muchas personas creen o consideran.

“La elección de juegos y colores, no dice nada de la orientación sexual de una persona, y su de los roles y estereotipos que se han asignado a niñas y niños”, subrayó.

Explicó que la orientación sexual (quien te atrae) y la identidad de género (cómo te percibes), son dimensiones diferentes de la sexualidad y no influyen entre sí.

En ese sentido, detalló algunos de los pensamientos, mitos o ideas que la sociedad suele tener con respecto a las personas que pertenecen a la comunidad LGBTI+ como lo son: “las personas bisexuales, son homosexuales que no se aceptan”; “En una relación homosexual, una persona hace de hombre y otra de mujer”; “es posible curar la homosexualidad a través de terapias psicológicas, hormonales y psiquiátricas”, entre otras.

Al responder estas afirmaciones, informó que, la bisexualidad, al igual que la heterosexualidad, es una orientación sexual más; pensar que una persona “hace de hombre” y “otra de mujer” es hacer referencia a los roles de género, idea que de que ciertas tareas solo pueden ser llevadas a cabo por mujeres o varones; y no, la homosexualidad no se cura, ya que no son enfermedades, asimismo, la orientación sexual e identidad de género no pueden ser modificadas por factores externos ni por voluntad propia.

Durán Rosado agregó que contrario a lo que otras personas piensan, en el tema de la transexualidad, esta no es un trastorno mental, sino una identidad de género, sin embargo, la manera como generalmente se representa a través de los medios de comunicación, redes sociales, etc., suele estar cargada de connotaciones negativas que desvirtúan la realidad.

Por último, explicó que la homo/transfobia, se define como actitudes, comportamientos que suelen pasar desapercibidos, adquieren un estatus natural; restringen y violentan reiteradamente hacia quienes se salen de una sexualidad hegemónica; cuando se hace notar, pueden parecer exagerados.

Apuntó que para construir una sociedad más equitativa, incluyente y respetuosa se recomienda: no hacer preguntas en torno a los órganos sexuales, operaciones o nombres anteriores; prestar atención y corregir el lenguaje cotidiano; recurrir a fuentes científicas; y respetar el nombre y pronombres elegidos, independientemente de su aspecto físico, si se tiene alguna duda es mejor preguntar, entre otras.