•  En PrevenIMSS se cuenta con personal capacitado para evaluar el estado nutricional, talla e índice de masa corporal de niños y adolescentes.

Mérida, Yucatán, 29 de agosto de 2022; Con la finalidad de proteger la salud de las y los niños, el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) brinda algunas recomendaciones para fortalecer hábitos saludables ante el regreso a clases, y poder evitar casos de obesidad infantil, condición que puede desencadenar muchas otras complicaciones durante su desarrollo.

Cabe señalar que en las y los niños, y adolescentes, la obesidad se registra principalmente debido a una mala alimentación y por falta de actividad física; aunque la genética también puede influir, ya que si los padres presentan obesidad o las madres durante los primeros tres meses de gestación, existe la posibilidad de que los hijos padezcan sobrepeso durante la niñez o adolescencia.

Sin embargo, es importante que los tutores o madres y padres de familia estén al pendiente de la salud de los menores; y de preferencia llevarlos a un chequeo preventivo mínimo una vez al año; ya que la obesidad durante estas etapas de la   vida puede provocar mayor riesgo de padecer enfermedades crónico-degenerativas como diabetes, insuficiencia renal, hipertensión arterial, males cardiacos y algunos tipos de cáncer.

La coordinadora Auxiliar Médica en Salud Pública, doctora Mirna López Gutiérrez, informó que en los módulos PREVENIMSS+, ubicados en las Unidades de Medicina Familiar (UMF), se cuenta con personal capacitado para evaluar el estado nutricional, talla e índice de masa corporal de cada niña y niños, así como para brindar orientación basada en tres pilares fundamentales: alimentación correcta, consumo de agua natural y práctica de actividades físicas.

De igual forma, el IMSS cuenta con la Cartera de Alimentación Correcta y Actividad Física, en donde los tutores o padres de escolares y adolescentes, pueden obtener recomendaciones, sugerencias e información sobre refrigerios saludables.

Algunas recomendaciones que pueden ayudar a la salud de los menores y prevenir casos de obesidad, son:

  • Para la elaboración de las colaciones seleccionar frutas y verduras de temporada.
  • Evitar meriendas con alimentos procesados, con azúcares refinadas o con mucha sal.
  • Exhortarlos y animarlos a realizar 30 minutos de actividad física al día.
  • Orientarlos a beber entre 6 y 8 vasos de agua pura al día.
  • Llevarlos a revisiones médicas preventivas para conocer su estado nutricional.
  • Realizar, en la medida de lo posible, cada comida de forma regular (tres comidas principales y dos colaciones).
  • Preparar de preferencia alimentos al vapor, asados, a la plancha, hervidos o al horno, para evitar freír, capear o empanizar.

Finalmente, si los menores registran dificultad para moverse, para agacharse y realizar actividades cotidianas, dificultad para respirar, dolores articulares, problemas para dormir y cansancio crónico; es importante llevarlos a un chequeo médico para descartar riesgos y recibir el seguimiento correspondiente.