La medallista de plata en el Campeonato Panamericano de Mayores realizado hace unas semanas en República Dominicana, Diana Chay Dzul es el ejemplo de madre deportista, y señala que “es muy difícil ser mama y ser atleta, es dividirme en dos o tres partes, entrenar ver a mis niñas a veces están conmigo en el gimnasio y si se me complica porque tengo que verlas y entrenar, pero es un reto que ya lo estoy superando”.
La también multimedallista nacional quien radica en Umán en la comisaría de Dzibikak, es madre de 3 pequeñas y cuenta: “se me complica con la más chiquita de un año y medio es la que está más apegada a mí y a veces me la tengo que llevar a los entrenamientos, la de 8 años y quiere hacer lo que yo hago, quiere competir, viajar como yo, la mediana de 4 años es más tranquila, con ella puedo practicar, solo con la más chiquita se me dificulta para entrenar porque requiere mayores cuidados”.
Sobre su participación en el Campeonato Panamericano de Mayores, resalto que es un resultado que no se esperaba pero que la dejo muy satisfecha, “no me esperaba el resultado de las medallas de plata, iba a competir con lo que tenía me dije si me voy a meter al medallero a darle con todo, pero no pensé que fueran platas y si estoy muy feliz y emocionada”.
La atleta es originaria de Valladolid, pero a raíz que se casó, vive en Uman con su esposo y nos contó que para el mes de agosto habrá un Campeonato Mundial por lo que continuará su preparación con miras a este evento, teniendo como prioridad deportiva mejorar sus marcas para ser tomada en cuenta para esta fecha.
El director del IDEY, Carlos Sáenz Castillo, estuvo acompañado de Ysela Chans Atala, directora del Instituto Patria, para felicitar a las madres de familia de la dependencia en su día, destacando que son un pilar importante para la sociedad y asegurando la importancia de la equidad de género y de la inclusión, en el actual Gobierno.
Las invitadas, contaron sus experiencias como las de Mirian Canul Cob, actual presidenta de la Asociación Yucateca de Atletismo quien en su rol de madre, ahora abuela y entrenadora tenía que llevar a sus hijos a sus jornadas de entrenamiento en la pista y campo del Estadio “Salvador Alvarado”.
Formadora de las nuevas generaciones de tenismesistas, Morayle Alvarez de Lovo, es actualmente entrenadora de la selección estatal y auxiliar de la selección nacional de esta disciplina, sus 2 hijos también practican este deporte que le ha dado muchas satisfacciones. Nacida en Cuba, viajó a El Salvador dónde se casó con el también entrenador Carlos Lovo García y actualmente viven en Yucatán.
Stephany Quintero Rodríguez, además de ser mama es practicante del futbol americano, afición que ha podido compaginar de manera exitosa gracias al apoyo y trabajo compartido de su esposo quien es químico de profesión.
Pilar Pompeyo Brito, jefa de Marketing Deportivo del IDEY, es mama de 2 pequeños, que son Juan Carlos y Natalia Carrillo Pompeyo, quien sin descuidar sus labores profesionales siempre está al pendiente del desarrollo de sus hijos.
Para Noemí Sánchez Pérez, presidenta de la Federación Mexicana de Boliche, madre y abuela, el trabajo de las entrenadoras es una muestra del ejemplo de responsabilidad y con ello demostrar que aun siendo madres pueden desempeñar cualquier papel.
María George Domínguez; madre del atleta paralímpico de natación Bryan Nolasco George; destaca la importancia del acompañamiento de una madre para con su hijo con discapacidad ya que muchas veces se vuelven una extensión de sus pequeños ya sea durante sus entrenamientos o durante su competencia.
